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DOCUMENTO MARCHA 15 DE OCTUBRE 2007
KAXUTUFIIÑ AWUKAGEKEN RE TAIÑ INKAN MEW TAIÑ ZUGUMartes 16 de octubre de 2007, por
KAXUTUFIIÑ AWUKAGEKEN RE TAIÑ INKAN MEW TAIÑ ZUGU
BASTA DE REPRESIÓN, A RECUPERAR LO QUE NOS PERTENECE COMO NACIÓN
DOCUMENTO OFICIAL MARCHA 15 DE OCTUBRE DE 2007
Pu peñi (hermanos), pu lamgen (hermanas) ka pu wenuy (amigos), este año nuevamente el pueblo mapuche se hace presente en las calles de la capital. El 12 de octubre es una fecha donde los pueblos indígenas no tenemos nada que festejar. La marcha del 12 de octubre es una movilización de repudio. Es un espacio que se ha ganado y legitimado con mucho esfuerzo en los últimos 15 años. Es, a estas alturas, un espacio de manifestación crítico, que nos permite realizar nuestras denuncias y posicionar nuestras demandas como movimiento mapuche.
La marcha de octubre no es una movilización para avalar las malas políticas del Estado y su gobierno de turno, sino que es una movilización para posicionar nuestro pensamiento y el pensamiento de los pueblos indígenas.
Asimismo, esta es una marcha que involucra mucho trabajo, esfuerzo y autogestión. Nada se hace por sí solo. La idea es que cada año la marcha tenga un contenido político, cultural y social importante, que no sea marchar por costumbre, sino convertir este lugar en un momento de expresión como pueblo-nación mapuche.
VIOLENCIA POLICIAL Y ENGAÑO ESTATAL
Pu peñi, pu lamgen, pu wenuy, el gobierno de Michelle Bachelet ha pretendido ocultar que todavía existe violencia y represión sistemática en el territorio mapuche; ha pretendido esconder que el gobierno apoya los intereses de los latifundistas y de las transnacionales que explotan el wallmapu: grandes empresas mineras, forestales, hidroeléctricas, salmoneras, etc. No obstante, sabemos y hacemos saber que gobierno ha seguido con sus malas prácticas, defendiendo al rico y amedrentando al mapuche.
Durante el año 2006 y 2007, por ejemplo, la comunidad mapuche de Temucuicui (Ercilla, IX región) ha sido víctima de múltiples allanamientos por parte carabineros, quienes defienden al latifundista René Urban. En esas acciones se han maltratado a mujeres, niños y ancianos. Los comuneros han sido baleados, golpeados, interrogados, robados y han recibido un trato racista y discriminatorio.
Las comunidad Lleulleuche (VIII región), por otro lado, también han enfrentado varios hostigamientos de parte de la policía y hoy por hoy una minera pretende instalarse en pleno lago Lleu lleu para acabar definitivamente con toda la vida que ahí existe. El gobierno los defiende y los apoya, como también lo hace avalando la construcción de aeropuertos en medio de comunidades mapuche y autorizando represas en las tierras de Neltume, Pellaifa y Coñaripe.
Por eso es necesario no dejarse engañar por las malas políticas indígenas del Estado, que se vanagloria de un reconocimiento constitucional que no hace más que seguir negando a la nación mapuche y que continúa con sus políticas asistenciales que ocultan nuestras reivindicaciones por derechos colectivos políticos y territoriales.
PRESOS POLÍTICOS MAPUCHE
Pu peñi, pu lamgen, pu wenuy, también debemos mencionar en esta ocasión a nuestros weichafe presos. Es necesario difundir que aún tenemos muchas hermanas y hermanos presos, injustamente procesados y condenados, que se han sacrificado enormemente realizando huelgas de hambre para exigir su libertad, recibiendo sólo la mentira y la sordera del gobierno, su carcelero.
Nuestra gente prisionera ha sido tratada como delincuentes comunes por la presidenta de este país a nivel internacional, negando los tremendos atropellos e irregularidades que se han cometido con ellos y que incluso han sido denunciados por varios organismos internacionales de derechos humanos. Por estas razones es que nuestro deber es seguir luchando y exigiendo su liberación, porque ellos no son delincuentes, ni asesinos, ni violadores, son personas que están encarceladas por defender los derechos de nuestro pueblo, por ser luchadores sociales, por ser destacados dirigentes. El Estado actúa reprimiendo a quienes son capaces de cuestionar su maquinaria política, los encarcela, los golpea o los asesina como sucedió con Alex Lemún.
REIVINDICACIONES COLECTIVAS
Pu peñi, pu lamgen, pu wenuy sabemos cada uno que nuestras demandas individuales pueden ser muchas, sin embargo, la posibilidad de encontrarnos aquí nos invita a reflexionar sobre nuestras aspiraciones colectivas, las que nunca debemos perder de vista.
No podemos olvidar jamás que somos una nación. Podremos tener diferencias unos con otros, pero pertenecemos al mismo colectivo. No somos una etnia, ni una cultura como pretende hacer sentir el Estado y sus leyes. Somos un pueblo al igual que todos los pueblos del continente, por lo tanto, con los mismos derechos, a pesar de que no quieran reconocerlo. No somos un pueblo de segunda ni tercera categoría.
En ese sentido, la lucha por el derecho a la autodeterminación debe continuar y plasmarse aún más en el pensamiento mapuche, vale decir, una lucha enfocada hacia el futuro, para que algún día podamos decidir como pueblo nuestro futuro sin ningún tipo de intervencionismo, ni estatales ni del depredador sistema capitalista. Sin embargo, en ese trayecto también es importante ir construyendo y ejerciendo ese derecho y no sólo demandarlo.
Tampoco debemos olvidarnos de la idea de reconstrucción de nuestro territorio o taiñ wallmapu, espacio histórico que no hace mucho fue usurpado por el Estado y que hoy sigue siendo explotado por las transnacionales. Se trata de un territorio donde mañana el pueblo mapuche deje de ser un pueblo oprimido y pueda desarrollarse en libertad. Es un anhelo histórico, que muchas comunidades ya han empezado a ejercer recuperando sus tierras usurpadas, recuperando la mapu que tanto sentido tiene para nosotros.
Asimismo debemos seguir potenciando nuestra idea de autonomía. Ésta ha sido la alternativa política, social y de construcción que el movimiento mapuche ha reivindicado en estos últimos 17 años y que se manifiesta como la vía para el ejercicio de la libredeterminación. Es necesario profundizar la discusión en torno a ella en nuestras organizaciones. Es necesario también practicarla día a día.
UNIDAD
Pu peñi, pu lamgen, pu wenuy son muchos los atropellos que debemos denunciar y son muchos y profundos los sueños que tenemos como pueblo. No obstante, son varios los caminos que debemos andar para obtenerlos.
Es necesario entonces que como organizaciones y comunidades reflexionemos sobre nuestro presente y futuro, sobre nuestras aspiraciones. La tarea es hacer conciencia de que somos un pueblo y fortalecernos como tal, por lo tanto, saber que tenemos derechos que podemos ejercer. La tarea es no dejarse llevar por las promesas de los malos gobiernos, sino construir una alternativa propia, autónoma.
Es necesario que avancemos también en mayores grados de unidad, priorizando nuestras semejanzas y no nuestras diferencias. Unidad en las demandas y en la lucha por nuestros derechos, independiente del lugar donde nos encontremos. Todo mapuche, esté donde esté, tiene el derecho de luchar por la liberación de su pueblo. El logro de nuestros sueños no es propiedad de unos pocos, es una tarea colectiva, que involucra a comunidades, organizaciones, estudiantes, artistas mapuche, etc. En ese sentido, quienes estamos en la ciudad, indudablemente, podemos ser parte activa de esta lucha, podemos reivindicar nuestro derecho a la libredeterminación, podemos luchar por nuestro territorio y por autonomía, generando y potenciando alianzas con más organizaciones, con más comunidades y con más personas que quieran lograr estos anhelos para nuestro pueblo; generando y potenciando alianzas que creen y propicien las condiciones para que algún día podamos vivir libres como pueblo; generando vínculos fuertes – verdaderamente interculturales- con la sociedad chilena y argentina que nos comprende y apoya.
FENTEPUI
Por eso pu peñi pu lamgen, debemos ser cautelosos con lo que ofrece el mal gobierno. Nuestra lealtad primero es con nuestro pueblo, con nuestra gente, no con quienes tienen el poder y el dinero. Dejemos de pensar en beneficios individuales y pensamos en colectivo, en la nación mapuche. No es posible que sigamos actuando divididos, disgregados.
Por ejemplo, no es posible que unos mapuche le rindan honores al asesino, usurpador y genocida ejército chileno, mientras miles de mapuche repudiamos ese acto. ¿Acaso esos peñi y lamgen que marcharon el 19 de septiembre se olvidaron de quién es ese ejército? ¿Se olvidaron que hace 120 años fueron ellos los que nos usurparon el wallmapu y nos anexaron a punta de fuego y guerra al Estado chileno? ¿Acaso hoy día no nos siguen oprimiendo?¿Acaso en la actualidad no nos quieren asimilar?
Unidad es a lo que debemos aspirar, pero sin olvidarnos de lo que buscamos. No unidad para mendigar monedas estatales. Unidad para luchar por la liberación de nuestro pueblo.
Pu peñi, pu lamgen, pu wenuy es relevante no dejarse engañar por los ofrecimientos del gobierno, sino ser críticos y pensar en colectivo. Todavía siguen maltratando a nuestros hermanos en distintas parte de nuestro territorio, no podemos silenciarnos, no podemos callarnos, debemos seguir de pie y con más fuerza cada día. Fei ka mvten. Marichiweu.
Santiago, octubre de 2007.
ORGANIZACIONES CONVOCANTES:
Organización Mapuche Meli Wixan Mapu
Centro de Comunicaciones Mapuche Jufken Mapu
Comunidad Mapuche Temucuicui
Comunidades Mapuche Lleulleche